Una inquilina ha interpuesto una demanda por las prácticas abusivas del fondo propietario del piso que alquilaba, la justicia ha estimado la demanda y ha condenado al fondo al pago de las costas del proceso judicial.
En este momento en el que la inflación y los tipos de interés están subiendo cada vez es más complicado ser propietario de una vivienda, esto ha supuesto un aumento de las personas que necesitan alquilar y por tanto los arrendadores cada vez suben más el precio y las exigencias a cumplir para poder alquilar su vivienda. Por eso antes de alquilar debemos hacernos la pregunta de ¿Qué me puede exigir mi casero para firmar el contrato de alquiler?
Siete han sido las cláusulas impugnadas por el Juzgado de Primera Instancia 31 de Barcelona por abusivas. El fondo inmobiliario Azora propietario de un piso de Granollers (Barcelona), ha sido condenado ya que la arrendataria ha decidido demandarlo por un contrato tan abusivo.
La sentencia aún es recurrible ante la Audiencia de Barcelona, pero hasta el momento, la demanda de la mujer has sido estimada y se ha condenado al fondo propietario a pagar las costas del procedimiento.
Entre las cláusulas que se han considerado abusivas destacamos:
- Cláusula que permitía retener la fianza por múltiples motivos.
- Cláusula que recogía una penalización desproporcionada (del triple del precio por día por cada día de retraso).
- Cláusula en la que renunciaba a derechos en caso de que se interrumpiera un suministro por cualquier causa no provocada por el propietario.
- Cláusula que regula el derecho del propietario a hacer visitas para comprobar el estado de la vivienda de forma periódica.
- Cláusula que estipulaba la resolución por incumplimientos no esenciales.
- Cláusula que imponía gastos por incumplimiento.
- Cláusula que recogía que todas las cláusulas del contrato se habían negociado individualmente, siendo totalmente falso.
Esta sentencia ha supuesto un gran paso para los derechos de los inquilinos y tendrá una gran trascendencia, siendo una sentencia pionera en España, así lo ha reconocido el Colectivo Ronda, al cual pertenece la demandante.
“por primera vez, un juzgado de España ha condenado la inclusión de cláusulas abusivas y que generan desequilibrios entre arrendadores y arrendatarios en los contratos de alquiler”.
Para terminar, debemos mencionar que el fondo Azora, pretendía aplicar una actualización de la renta del 30%, haciendo que la inquilina que actualmente paga 690 euros mensuales de alquiler desde 2020 comenzase a pagar 1.100 euros.
El Sindicat de Llogateres, que fue el encargado de interponer la demanda en representación de la inquilina afectada, se alegró de la sentencia, puesto que considera que “abre las puertas a cambiar el futuro de miles de personas afectadas por estas cláusulas en sus contratos de alquiler”.